viernes, 14 de marzo de 2014

UN BUEN LEMON PIE

Mi idea como Chef y comensal de un buen -Lemon Pie-:

Debe tener una combinación de texturas, base crocante, relleno suave, cremoso y estable, merengue italiano, aireado, con ligeros toques melcochudos, cada uno en su justa proporción.
Debe tener un contraste de sabores que armonizan entre sí, una base suave ligeramente dulce, casi neutra, un relleno en el punto exacto de acidez para que sea refrescante y combine perfectamente con la dulzura del merengue.


Si el relleno no tiene suficiente acidez resultará un postre muy dulce, sin gracia, empalagoso, si el relleno es aguado, se verá desprolijo y le faltará textura en boca, si es muy firme resultará otra cosa, sin suavidad sin untuosidad. 


Si el merengue es muy dulce será hostigante, si no tiene picos firmes se volverá más una espuma aguachenta, si está viejo generará una costra desagradable medio azucarada, si le falta azúcar resultará insulso, sin los picos caramelizados le faltará presentación y nos perderemos de esos toquecitos melcochudos con un ligero amarguito que contrasta de manera perfecta y si la base no es quebradiza, doradita, suave, se pierde esa crocantez que hace que nuestro paladar disfrute tres texturas, tres sabores...

Imagen tomada de internet. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario